miércoles, 22 de mayo de 2013

Dejamos Munich, camino a Salzburgo.....

Siguiendo con nuestro viaje por Baviera, después de abandonar Munich nos dirigimos en tren a Salzburgo. El trayecto es de casi dos horas, así que como habíamos tenido un poco estresante nuestra salida de Munich, por que no encontrábamos la taquilla y finalmente, perdimos el tren que queríamos coger...pues nada nos montamos en el tren y tranquilitos hacia Salzburgo. Cuándo nos levantamos por la mañana en el maravilloso Hotel NH Salzburg City, el cual recomiendo. Un Hotel céntrico, moderno y con unas habitaciones estupendas... Por supuesto, lo primero asomarse a la ventana a ver que había tras ella y, mi primera impresión fue de frío, ya que todos los tejados estaban todavía nevados.

Bonitas vistas de la Ciudad de Salzburgo

Salzburgo es una ciudad señorial, apacible, limpia, tranquila, una ciudad de cuento. A mí, personalmente, me llamó la atención la limpieza de sus calles, sólo encuentras hojas de los árboles, que le da a la ciudad un aspecto natural y agradable.




 Empezamos nuestro primer día en Salzburgo, hoy lo dedicaríamos a recorrer esta bonita ciudad... Lo primero fue bajar hacia el centro y acercarnos a la oficina de turismo. Allí compramos la Salzburg Card, una tarjeta turística con la que puedes visitar todos los lugares de interés de esta bonita ciudad.
  El centro histórico de Salzburgo es una verdadera maravilla, sus edificios señoriales, sus iglesias, sus castillos, sus bonitas calles, sus paisajes. La ciudad está coronada por la Fortaleza Hohensalzburg 

Fortaleza Hohensalzburg



Antes de subir al funicular que te lleva a la fortaleza, dimos un paseo por esta bonita ciudad. Está dividida por el Río Salzach, y rodeada de montañas. Esta fortaleza es la más grande y mejor conservada en su totalidad de todo Centroeuropa.

Vistas de la ciudad de Salzburgo desde Hohensalzburg

       

 Las vistas desde la Fortaleza son impresionantes, se puede ver toda la ciudad. La Fortaleza es bonita e interesante, aunque yo creo en la época de verano tiene que estar muy animada, y tiene que ser muy agradable subir y contemplar esta bonita ciudad. En esta época estaba un poco vacía.


Octubre nevado en Salzburgo 



Bajamos andando desde la Fortaleza, ya que el funicular se había estropeado...con lo cual pudimos
seguir disfrutando de sus vistas y hacer fotos de esta preciosa ciudad.






 Aunque todavía estábamos en Octubre, hemos podido hacer fotos con todos los tejados nevados... belleza añadida a estos bonitos paisajes. Uno de los pueblos que no quería venirme sin visitar era Hallstatt. Había visto tantas fotos preciosas de este pueblo de ensueño, con las casitas casi encima del lago, me parecía un pueblo de cuento que no me podía perder... Así que al día siguiente organizamos todo para llegar hasta este bonito sitio. Hicimos el trayecto en tren hasta Bad Ischi... otro pueblo precioso. El trayecto por la región de Salzkammergut es realmente precioso, son todos pueblecitos al pie de las montañas y los lagos.. todos los pueblos iguales con sus casitas de madera, sus prados verdes, aunque ahora la mayoría estaban nevados.


Hallstatt
 

 Cuando el tren llega a Bad Ischi hay que hacer transbordo y coger otro tren que te lleva a Hallstatt, debajo de la parada de tren se coge un barquito que te lleva al pueblo, valor añadido a este viaje tan bonito. Las vistas en el barco son increible, y el frío que hacía en cubierta también...je,je..


 

 Estuvimos callejeando por el pueblo y todo lo que vimos nos gustó, está lleno de turistas pasando el día principalmente, aunque había algún que otro asiático con maletas dispuesto a pasar noche. Nosotros recorrimos cada rincón, y todo lo que vimos nos pareció una verdadera maravilla, hasta vimos un pequeño cementerio precioso; en el que además estaban poniendo plantas y flores los familiares, con motivo de la festividad del día de los difuntos. Lo que si hicimos fue montones de fotos, ya que el sitio lo requería. 

El barquito que cruza el lago hasta el pueblo de Hallstatt


Bonito día el que pasamos en Hallstatt, a la hora indicada cogimos el barco de vuelta para coger el tren que nos llevaba de vuelta a Salzburgo. Todo está bien indicado en el muelle donde se coge el barco, te ponen los horarios del barco para poder conectar con los del tren. Esta vez cogimos el tren que iba a Innsbruk y tenía parada en Salzburgo, así que no tuvimos que hacer transbordo. El último día lo pasamos en Salzburgo, ya que teníamos tiempo hasta por la tarde que emprenderíamos camino a Memmingen de donde salía nuestro vuelo a la mañana siguiente. Así que decidimos ir a ver el Palacio de Hellbrunn. Nos volvimos a sacar la Salzburg Card, para poder visitar otras atracciones de esta bonita ciudad.

Palacio de Hellbrunn 




El Palacio es muy bonito, pero lo que más me gustó fueron los famosos "juegos de agua", tienen visitas guiadas y te lo pasas realmente bien. Los juegos de agua están escondidos y te los vas encontrando conforme te los van explicando, y como te descuides sales de allí "duchado", pero la verdad que te pasas un rato divertido. Los jardines están llenos de estanques, grutas, fuentes, figuras que se mueven con el agua. Bonita residencia veraniega la que tenía el príncipe-arzobispo para deleitar a sus amigos con fiestas y divertidas sorpresas acuáticas.  

 Otra cosa que me gustó fue el teatro de marionetas en miniatura, interpreta todos los oficios de la época y cuando se ponen en marcha las marionetas, está realmente bonito.

 

 Una vez terminada nuestra visita, regresamos en autobús a Salzburgo a pasar las últimas horas antes de regresar a casa. Nos fuimos a ver el Palacio y los Jardines de Mirabell, que se encuentran en pleno centro de la ciudad. Son unos jardines muy bonitos, aunque me imagino que cuando más bonitos estarán serán en primavera y verano con todo el esplendor de sus flores. Desde los Jardines se ve al fondo La Fortaleza y la Catedral de Salzburgo, también aquí hicimos fotos muy bonitas...

 
Después de un buen paseo por estos bonitos jardines, nos dirigimos a la Casa Natal de Mozart, que también está en el centro de la ciudad. Es un museo en el que puedes ver la historia de este genio de la música, vas viendo su vida familiar, sus instrumentos, los conciertos que fue componiendo a lo largo de su corta vida, sus giras... es muy interesante y no te lo puedes perder si vas a la ciudad de Salzburgo... Después de esta visita, nos fuimos a comer al centro y a planificar nuestra salida a recoger las maletas al hotel y emprender nuestro viaje en tren hacia Memmingen. En este viaje en tren tuvimos un pequeño percance, ya que en una de la paradas nos teníamos que haber bajado y nosotros confiados seguíamos sentados. Menos mal que la revisora del tren, yo creo que nos vio la cara de extranjeros perdidos y nos preguntó si íbamos a Memmingen, le dijimos que sí y nos indicó que estábamos en la dirección equivocada. Así que en la siguiente parada nos bajamos y allí estábamos en medio de la nada, en una estación perdida de Alemania, esperando a ver si llegaba un tren que nos llevara a nuestro destino. Finalmente llegó un tren, le preguntamos a alguien que nos dijo que sí, que era el tren correcto. En Memmingen teníamos reservado para esa noche en el Airport Hotel Bergers Park, una magnifica opción, ya que le hotel está fantástico, muy moderno, renovado y muy limpio. Lo que pasa que sólo era para una noche, además al aeropuerto vas andando en 5 minutos. Ha sido un viaje precioso a una zona que no conocía, me han encantado los paisajes, los pueblecitos, y tanto Munich como Salzburgo me han parecido unas ciudades realmente interesantes para conocerlas...

Hallstatt, un pueblo precioso 



jueves, 14 de febrero de 2013

Callejeando por Munich...

Empezamos a planear este viaje, como siempre mirando los vuelos desde Málaga con Ryanair, que aunque este verano ha estado movidito con esta compañía, hay que reconocer que son los que más vuelos directos tienen a Europa desde Málaga y los más baratitos. La verdad que nosotros hemos viajado varias veces y nunca hemos tenido ningún problema. Tengo que decir en favor de ellos que son tremendamente rápidos y eficaces. En un momento tienen a todo el mundo subido al avión y todo preparado para despegar. Llevábamos tiempo queriendo ir por la parte de Alemania y, finalmente, cogimos nuestro vuelo a Memmingen. Este aeropuerto tiene buenas comunicaciones con Alemania y con Austria, así que decidimos alojarnos en Salzburgo, pero nuestra primera parada sería Munich.
Aunque el viaje ha sido a finales de Octubre, precisamente ese fin de semana había caído la primera nevada por Alemania y Austria, así que cuando estábamos aterrizando pudimos ver una estampa muy invernal con todo nevado. El aeropuerto de Memmingen es muy pequeño, pero la verdad tiene bastante movimiento de gente... Cómo ya había leído bastante de como llegar a Munich, enseguida buscamos el autobús que hay directo, que es lo más cómodo. El enlace para saber los horarios, etc, es http://www.allgaeu-airport-express.de. Salió unos minutos después de haber aterrizado el avión, nos subimos y en pocos minutos ya estábamos rumbo a Munich. Todo el camino completamente nevado y con una pinta de frío.... El autobús te deja en el centro de la ciudad, y andando unos minutos llegas a la Plaza Marienplatz ,, esta plaza está en pleno centro de la ciudad y te la encuentras sí o sí.... Lo más bonito de la plaza es el Ayuntamiento Nuevo (Neues Rathaus), con su fachada llena de esculturas y gárgolas y el Glockenspiele, que es el famoso reloj que a las 11 y a las 5 de la tarde activa su famoso carillón y cobran movimiento sus figuras imitando un torneo y una danza.
Sólo íbamos a estar unas horas en Munich, así que nos movimos por los alrededores de la Plaza, todas estas calles están muy animadas, llenas de tiendas, cafeterías, restaurantes... Seguimos andando y llegamos hasta el famoso Viktualienmarkt, en principio este era un mercado de campesinos y ha ido evolucionando hasta convertirse en un mercado con toda clase de productos y puestos de flores, comida, regalos....
Seguimos andando y entramos en La Residencia de Munich (Münchner Residenz), el antiguo Palacio de los Reyes de Baviera y que está en pleno centro. Es un palacio con más de 600 años de historia, y que fue destruido durante la II Guerra Mundial y posteriormente reconstruido y sirvió como residencia de la familia Wittelsbach. Esta familia lo amplió varias veces, llegando a construir un complejo de 7 palacios. Se pueden ver gran cantidad de cuadros, tapices, antigüedades.... Después de visitar este bonito palacio, decidimos entrar en una de las famosas cervecerías de Munich a probar sus ricas cervezas y comer algo típico de Alemania. Estuvimos buscando la famosa cervecería Hofbrauhaus, pero no la encontramos. Así que nos metimos en una que vimos también muy típica y que se llama Weisses Brauhaus, es la típica cervecería alemana con mesas muy grandes.. en las que tienes que compartir mesa donde haya un hueco. A lo primero nos choca un poco esto de compartir mesa con extraños, pero luego no está tan mal y así también se socializa. Nos tocó compartir con un alemán mayor y estuvimos hablando un poco con él en ingles... En esta cervecería se bebe la cerveza Schneider Weisse, muy buena, como todas las cervezas en esta parte de Europa. Después de algunas comer un poco en esta típica cervecería, y tomarnos algunas cervecitas, decidimos volver a seguir callejeando. Ya eran casi las 5 de la tarde y justo pasamos por el Ayuntamiento donde estaba en movimiento el famoso carillón. Pudimos ver las figuras en movimiento.... Seguimos paseando y, como ya hacía bastante frío, decidimos entrar en una cafetería, y pedirnos unos chocolates calentitos, y tomar rumbo a la estación para coger nuestro tren ...... Habíamos dejado nuestro equipaje en las consignas de la estación, pero resulta que hay dos partes separadas de consignas y, claro no nos habíamos fijado al dejar el equipaje. Así que nos volvimos realmente locos buscando nuestra consigna, se nos pasó la hora del tren y seguíamos buscando nuestro equipaje. Finalmente, tuvimos que ir a buscar a un señor de información que, amablemente nos llevó hasta nuestra consigna. Salimos pitando al andén, pero con puntualidad alemana, nuestro tren a Salzburgo salía..... Menos mal, que el billete que compramos se puede usar para cualquier horario... así que nada, nos compramos un bretzel, que es un dulce típico de allí y que lo hay de todas clases; están rellenos de cualquier cosa, salado, dulce... y que está buenísimoooooooooo. Para viajar por la zona de Baviera, lo mejor es conseguir el Bayern Ticket, ya que te sale mucho más barato. Ellos no te dicen nada cuando vas a preguntar por los billetes de tren, así que es mejor llevarse la lección aprendida. La diferencia de precio es muy grande, con el Bayern Ticket la primera persona paga 22 euros y va subiendo 2 euros cada persona que viaja... Está realmente bien!!!! PROXIMA PARADA .... SALZBURGO...